sábado, 7 de febrero de 2015

Tema extra 2. TDAH

Otro tema de interés y auge en los últimos tiempos es es Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, del cual he creído adecuado hacer una pequeña introducción sobre el problema en sí y las posibles intervenciones psicoeducativas.
Las manifestaciones clínicas del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) vienen determinadas por factores biológicos, genéticos, neurológicos y ambientales. Su tratamiento por ello es (o debe ser) multimodal: con intervenciones educativas, farmacológicas y psicosociales. El tratamiento ha de ser multimodal
En la actualidad hay evidencia empírica de que el TDAH está enormemente influido por factores ambientales  de lo cual se deriva que un adecuado abordaje debe contemplar de forma temprana los contextos del niño.  Es importante ayudar a los padres a comprender y manejar el comportamiento de los hijos. Dentro del contexto familiar, Jarque Fernández S.(2012), a través de una revisión bibliográfica de diferentes estudios que investigan la eficacia de las intervenciones del TDAH  encontró que los tratamientos psicosociales disminuyen el distrés familiar y mejoran las habilidades parentales.
El entrenamiento psicoeducativo a maestros ha resultado de bastante eficacia en diferentes aspectos: mejoras en la conducta centrada en la tarea y conductas disruptivas en niños con TDAH, así como en la reducción de síntomas centrales y algunos asociados, como conducta antisocial, trastornos psicopatológicos y trastornos de ansiedad, lo cual repercute en una mejora del rendimiento académico, la competencia social y el cumplimiento de normas.
De las intervenciones psicosociales, las que están empíricamente validadas son el entrenamiento a padres y maestros en técnicas de manejo conductual, y en menor medida las técnicas cognitivo conductuales y el entrenamiento en habilidades sociales (Jarque Fernández S. 2012).
Las intervenciones psicosociales cobran gran relevancia desde el prisma del TDAH, ya que se trata de un trastorno de origen neurobiológico que presenta no sólo disfunciones cognitivas, sino también alteraciones afectivas (tanto motivacionales como emocionales). Las afectivas involucran dificultades en el procesamiento de la recompensa, adversión a la demora, así como en el procesamiento y regulación emocional. Además de que al tener una sintomatología crónica se produce un fuerte impacto en el ámbito familiar, social y académico. .
A favor de la mayor importancia a las intervenciones psicosociales en TDAH (sin querer infravalorar la necesidad de una intervención farmacológica) hay que señalar el hecho de que el aumento del consumo de fármacos para el TDAH en EEUU se debe en cierta medida, a que el sistema sanitario tiende a favorecer los tratamientos farmacológicos frente a los conductuales ya que resultan más rentables económicamente hablando. Esta situación puede ser fácilmente extrapolable a nuestro entorno.
Para finalizar, expondré la gran variedad de intervenciones psicosociales y educativas en relación al TDAH, las cuales resultan muy eficaces en el tratamiento combinado.
1.      Educación al menor:
Ayudarle a conocer su trastorno. Sus debilidades y fortaleces. Y que no está solo, existen muchos niños y adolescentes con TDAH. Desarrollar habilidades sociales y académicas que mejoren su autoestima y favorezcan sus relaciones con la escuela, familia y amistades. Ensayar un manejo de resolución de problemas que le aporte mayor seguridad.
2.      Intervención familiar:
Procurar a los padres información sobre TDAH. Y evitar sentimientos de culpabilidad. Transmitirles la importancia del Refuerzo positivo. Enseñarles a definir reglas claras: órdenes concisas y sencillas, límites infranqueables y otros negociables. Y apreciar los esfuerzos. Dividir las tareas en pasos más sencillos.
Educarles en la importancia del mantenimiento del orden y rutina en el ambiente familiar. Mantenimiento de la disciplina, es decir, un menor con TDAH no tiene por qué ser maleducado, aunque le lleve mayor tiempo aprender ciertas reglas.
Enseñarles a utilizar el tiempo fuera: cuando el niño se descontrola frente a una situación, retirarle toda la atención. Hacerle recapacitar sobre qué ha sucedido y felicitarlo por haber hecho bien el tiempo fuera. Aprender a quererlo y aceptarlo tal como es.


3.      Intervención en el ámbito escolar y académico:
Mostrar al profesor qué es el TDAH y cómo puede ayudar a la integración del niño. Mostrar al profesor estrategias para colaborar. Que le ayude a evitar a distracción: situándolo en primera fila, junto a compañeros más tranquilos, supervisándolo a menudo… Que ayude a mantener su atención con estrategias como por ejemplo, tocarle el hombro al pasar junto a él. Que premie los avances por pequeños que sean. Que mejore la conducta frente a la tarea académica del niño. Es muy importante que exista un plan de apoyo académico coordinado con la familia y el equipo médico. Si el niño va medicado el profesor ha de conocer la medicación y sus posibles efectos adversos.
4.      Intervención a escala social:
Actividades extraescolares en las que el niño mejore sus habilidades sociales, como por ejemplo, las artes marciales donde aprenderá autodominio personal.
También resultan muy beneficiosas las actividades deportivas o de tipo scout, donde aprenden a respetar y valorar las normas y reglas de los juegos, a colaborar y a convivir entre iguales, y otros valores tales como la solidaridad, el compañerismo y la autosuperación, lo cual redundará positivamente en su  capacidad de autonomía, así como en su autoestima e iniciativa personal.
A modo de conclusión, y tal y como afirma Jarque Fernández debemos seguir avanzando en la ardua tarea del abordaje del TDAH infantil y adolescente desde una perspectiva psicosocial.
Para finalizar añado unos videos a mi parecer muy interesantes a través de los siguientes enlaces:
http://descargas.pntic.mec.es/cedec/atencion_diver/contenidos/dificultades/tdah/
http://www.rtve.es/alacarta/videos/informe-semanal/informe-semanal-energiainquietos/166148...
http://www.youtube.com/watch%3Fv%3DOhvDqsUSfhI  
Bibliografía:
    Jarque Fernández S. (2012). Eficacia de las intervenciones con niños y adolescentes con Trastorno por déficit de Atención con Hiperactividad. Anuario de psicología (42) (págs.19-33). Universitat de Barcelona.
         Bakker L, Rubiales J. y López M. (2012). Percepción del estrés escolar y ritmocircadiano de cortisol en niños con TDAH. Arch Neurocien (17) (págs.39-44).
         Palomino M.D., Pérez Guerrero C y Martin-Calero M. J. (2013). Tratamiento actual del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Pharm Care. (15) (147-156).

         Santurde del Arco E, Del Barrio del Campo J. A. (2013). TDAH: Intervenir en el fomento del apego. International Journal of Developmental and educational psicology. (1) (págs.265-270).
Apuntes  de las prácticas de la asignatura Intervención y tratamiento Neuropsicológico y Psicofarmacológico

No hay comentarios:

Publicar un comentario